×
Haga clic para más productos.
No se encontraron productos.
Haga clic para más productos.
No se encontraron productos.

Kome Miso (No Pasteurizado) Tarrina Mimasa

Pasta de soja y arroz fermentada con semillas de koji en tinajas de madera durante 18 meses. Es el más más dulce de los Misos. No pasteurizado. Tradicionalmente los Misos se usan para reforzar el intestino y regenerar la flora intestinal. 

Lee masShow less
8,75 € (impuestos inc.)
Fuera de stock
Avísame cuando esté disponible
Cerrar
Marca:
Favorito0
A lista de deseos
Descripción

KOME MISO

Pasta de soja y arroz fermentada con semillas de koji en tinajas de madera durante 18 meses. Es el más más dulce de los Misos. No pasteurizado.
Tradicionalmente los Misos se usan para reforzar el intestino y regenerar la flora intestinal.

Composición: Soja no transgénica 32,0%, Arroz 26,0%, Agua 29,98%, Sal marina 12%, fécula de patata 0,036%, semilla de koji (Aspergillus oryzae) 0,02%.
Fabricado en Japón.
Presentación: tarrinas de 300 grs.
Modo de preparación: diluir 1 cucharadita de Miso en una taza de caldo caliente.
También se pueden preparar deliciosos patés mezclándolo con Tahin (Pasta de Sésamo) y agua, o usar como aderezo en salsas. No hervir para que preserve todas sus propiedades. Abierto el paquete, guárdese en el frigorífico.

Valores nutricionales por 100g:
Energía 181kcal
Agua 47,7g
Proteínas 10,4g
Lípidos 5,4g
Carbohidratos 22,7g
No-fibroso 22,7g
Fibra -
Ceniza 13,8g
Sodio 4900mg

EL MISO CON ARROZ BLANCO APORTA TODAS LAS PROPIEDADES DE LA SOJA Y ES EL MÁS DULCE DE LOS EXISTENTES.

Este tipo de miso estaba reservado para la aristocracia y los samurais japoneses, ya que el arroz blanco era el alimento de las clases altas. Pero desde hace unos cien años, ha pasado a ser el tipo de mayor consumo en Japón. Tiene un agradable sabor dulce. El 80% del kome miso se fabrica en el norte de Japón y el más habitual es el salado. Pero también es posible encontrar miso dulce, preparado sin sal.

La historia del miso comenzó en el siglo VI dC, cuando se trajo por primera vez de la antigua China un condimento fermentado llamado “Hisio”. Su nombre derivó a “Mishio” y posteriormente a ”Miso”. En un principio, fue tratado como un producto precioso, caro, reservado para la nobleza, que incluso se usaba para pagar a los oficiales de alto rango. La sopa miso se elaboró por primera vez en el siglo XII. En el siglo XIV, el miso se popularizó entre la gente común, y muchos empezaron a elaborarlo en sus hogares. Actualmente, el miso es esencial en la cultura gastronómica de Japón, pero todavía no es valorado suficientemente en occidente.

Durante el periodo Edo (1603-1867), Ieyasu Tokugawa, el primer Shogun, llevó a la familia Tokugawa a unificar Japón. Durante este período, la esperanza de vida era de 37-38 años. Sorprendentemente, Ieyasu Tokugawa vivió hasta los 75 años. La opinión generalizada es que su vida fue inusualmente larga para su tiempo debido al consumo diario de sopa miso con una gran cantidad de verduras. A partir de entonces, la sopa miso fue la base de las comidas en la familia Tokugawa. Esta familia reinó en el país durante más de 250 años y su fuerza se atribuye al consumo diario de este rico alimento.

Proceso de elaboración
El kome miso se elabora con arroz blanco y tiene un agradable sabor dulce, pese a que igualmente se utiliza sal marina en su elaboración. El koji se mezcla primero con el arroz blanco y, cuando ha fermentado, se une a la soja. El proceso de fabricación se divide en cuatro pasos: el primero es la preparación del koji, después la preparación de la soja, el proceso de mezcla del koji con la soja, y por último la fermentación del miso durante 18 meses. La soja se prepara lavándola y dejándola en remojo. Su tamaño aumenta 2,2 veces. Posteriormente se cuecen al vapor, se dejan enfriar y se mezclan con el koji y sal marina. Después se tritura toda la mezcla.

El kome miso de MIMASA fermenta siguiendo centenarios métodos tradicionales, en barriles de cedro a temperatura ambiente. Durante la fermentación se activan las enzimas y bacterias de koji (Aspergillus oryzae) y para evitar la oxidación, pesadas piedras se colocan encima de los barriles para aplastar la mezcla y separar la pasta de miso del aire y acelerar la fermentación.

Para la elaboración del kome miso de MIMASA sólo se utilizan ingredientes naturales (soja ecológica no transgénica, arroz, agua, sal marina, fécula de patata y semilla de koji), para cuyo cultivo no se han utilizado ni fertilizantes ni otros productos químicos. El resultado es un producto con un aroma y una calidad únicos, muy rico en nutrientes. Los misos en los que el proceso de fermentación se acelera con calor pierden estos nutrientes. Lo mismo ocurre cuando se le añaden conservantes y colorantes. Las enzimas digestivas y aminoácidos sólo los encontraremos en misos fermentados naturalmente durante, como mínimo, más de un año, sometidos a las fluctuaciones de temperaturas de las estaciones.

Propiedades nutritivas
La soja, el principal ingrediente del kome miso, es rica en proteínas, pero es difícil de digerir. En el miso, la proteína de la soja se desintegra en aminoácidos durante la fermentación, con lo que no sólo la hace fácil de digerir, sino que además ayuda el sistema digestivo y a repoblar la flora intestinal.

El miso es la forma más saludable y fácil de asimilar la proteína de soja. En su fabricación se utiliza todo el grano de la soja, incluida la piel. De este modo, el miso tiene el beneficio añadido de sustancias tales como la saponina, el ácido linoleico y la lecitina, que ayudan a disolver el colesterol adherido a las paredes sanguíneas. Por lo tanto, el miso favorece la prevención de la presión arterial alta, de la acumulación de lípidos en el plasma y de accidentes cerebrovasculares. Asimismo, contribuye a mantener la elasticidad de los vasos sanguíneos.

La vitamina B2 que se obtiene a partir del koji promueve la reducción de la oxidación del organismo, mientras que su aporte de vitamina B12 ayuda a la formación de la sangre y reduce la fatiga mental. La vitamina E de la soja favorece que se inhiba la peroxidación lipídica, provocando un efecto anti-envejecimiento. A esto también contribuye la saponina, que además favorece la prevención del endurecimiento de las arterias y de enfermedades hepáticas. Por su parte, las enzimas de la semilla de koji, los fermentos y las bacterias del ácido láctico ayudan a la digestión.

Las isoflavonas de la desoxidación de la soja alivian la rigidez en el cuello y los hombros. Asimismo, favorecen la prevención del cáncer de mama. La colina de la soja favorece la prevención del hígado graso y del envejecimiento. En el siglo XVII, se descubrió que las pipas quedaban más limpias de restos de nicotina si enjuagaban con sopa miso y no sólo con agua caliente. Ahora se sabe que la vitamina B del miso favorece la eliminación de las sustancias nocivas del tabaco y que también protege la garganta.

En 1945, en Nagasaki, Japón, después del lanzamiento de la bomba atómica el Dr. Tatsuichiro Akizuki, director del Urakami Dai-Ichi Hosital (actualmente llamado St. Francis Hospital) salvó muchas vidas alimentándose con arroz integral y sopa miso con algas. El Dr. Hiromitsu Watanabe, del Research Institute for Radiation, Biology & Medicine de la universidad de Hiroshima, estudió ampliamente el efecto protector del miso tanto en radiación como en cáncer. Otros investigadores se han sumado a estos estudios y actualmente podemos afirmar que el miso favorece la descarga de sustancias radiactivas en el cuerpo y, además, el HEMF, la sustancia antioxidante del miso, favorece la eliminación las células cancerosas causadas por la radioactividad.

Forma de consumo
De forma tradicional, el kome miso se toma especialmente como condimento en sopas, patés, legumbres y cereales. Normalmente se añade cuando ya hemos terminado de cocinar un plato y hemos apagado el fuego. Entonces diluimos una cucharadita pequeña de kome mismo de MIMASA por ración en la sopa o caldo. Dejamos que repose unos minutos y ya podemos servir. También se pueden preparar deliciosos patés mezclándolo con tahín ecológico de MIMASA y agua, o usar como aderezo en salsas.


Hay que tener en cuenta que no es necesario añadir sal al kome miso de MIMASA, pues ya es un condimento que tiene sal. Por ello, cuesta mucho que el kome miso de MIMASA se estropee, pero si vivimos en un sitio cálido es mejor ponerlo en la nevera una vez abierto el envase. Al ser un fermento, no se debe hervir, ya que de lo contrario perdería sus propiedades.

Lee masShow less
Detalles del producto
14022
Opiniones
También te puede interesar...
9,03 € (impuestos inc.)
Pasta de soja y arroz integral fermentada con semillas de koji en tinajas de cedro durante más de un año. Tradicionalmente los Misos se usan para reforzar el intestino y regenerar la flora intestinal.

Menú

Ajustes

Haga clic para más productos.
No se encontraron productos.

Crear una cuenta gratuita para guardar tus favoritos.

Registrarse

Crear una cuenta gratuita para usar listas de deseos.

Registrarse